Como se puede obserar en la foto anterior y en algunasquepondre mas adelante, estuve una semanita en Punta Cana, un paraiso terrenal, en donde la gente se empeña enir a coplejos hoteleros, en vez de conocer esa hermosa tierra dentro de la Republica Dominicana, es una pena.
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| De Punta Cana |
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LA SALIDA
Este fue el viaje mas alucinante que he hecho por ahora, por ello relatare un poco como fue.
Salimos de Castellón con un cielo que se nos caia encima, entramos al autobus chopados hasta la medula.
Despues de unas horas en el autobus, llagamos a barajas, en donde estuvimos unas horitas (que raro) para pillar el avión, por suerte el nuestro fue bastante puntual.
LOS PRIMEROS DIAS
La primera mañana fue un poco rarita, un desayuno continental, acompañado de una breve estancia en la playa, y la toma de decisiones, elegir escursiones y que ponerse a beber primero, seran los combinados o ron con cola para empezar.
Una vez elegidas las escursiones tocaba bar y piscina, acompañado con un poco de playa.
Empezamos a tostarnos un poco.
La comida fue impresionante, a base de buffet libre llenamos el estomago, posteriormente una siesta y luego de vuelta al bar
Por la noche un bailoteo empezado como no por una visita a la barra, no es de extrañar que al final nos conocieran todo el servicio de barras.
LAS ESCURSIONES
LA primera salida para visitar todo lo que habia mas allá del Resort nos llevó a los altos de Chabron y a una pequeña isla, Isla Saona, un lugar maravilloso.
Antes de visitar la isla hicimos un recorrido por uno de los antiguos poblados que quedan de la epoca colonial, ahora rodeado de urbanizaciones de gente famosa en los altos de Chabron.
Para llegar a la isla, cogimos un barco en el que pasamos la mayor parte del trayecto bailando y bebiendo ron, es normal que llegaramos ya bolinga. Sobre todo Ivan que nos dejo parados con cada una de las paridas que soltava, aun se me saltan las lagrimas de recordarlo.
En aquella isla, recuerdo haberme hecho unas trenzas y un baile muy movidito y seductor llamado el baile del timón, que creo que aun recordaria los pasos si encontrará la canción.
Mas tarde despues de un agape y un baño salimos de aquella isla para vistar una piscina natural donde residian las estrellas de mar mas grandes que he visto en mi vida.
Otro dia salimos a ver el interior de la isla, en donde un paseo con boggie nos llevo a una plantación de café y cacao, de la cuall me traje semillas que ahora crecen en mi villa, si alguien quiere que lo diga, cafe, esta saliendo a montones.
Otra escursión la hicimos con lanchas, por parejas en donde nos turnamos para hacer el cabra. Mas tarde fuimos a hacer Snorqueling para ver la fauna marina de la zona.
La ultima escursión, si así se puede llamar fue la visita a un restaurante famoso en donde degustamos una mariscada para caerse de culo.
Si alguien va para allá ya sabe a quien acudir si necesita consejo, creo que lñas cuatro escursiones me salieron por 200 euros en total, muy barato para todo aquello que hicimos.
LAS JUERGAS EN EL HOTEL
NO es de extrañar que un grupo de estudiantes universitarios no se corriera grandes juergas en el peazo Resort en el que estabamos.
Casi todas las noches la rutina era aparecer por el bar de la piscina y beber roncito hasta que nos cerraban, eso implica unas 4 o 5 horas de estar mucho rato charlando con los compañeros o bailando en una pequeña pista de baile improvisada.
Cuando ya no habia allí nada mas, nos ivamos hasta la discoteca dentro del complejo hotelero y estabamos bailando hasta las 5 o las 6 de la madrugada.
Un consejo: Aprender a bailar, es el sumun, te lo puedes pasar en grande si dejas la vergüenza de lado.
Ya os lo podeis imaginar, acabamos con los pies destrozados todas las noches, pero merecio la pena.
LA PLAYA
No me imaginaba cuando llegue que encontraria playas con el agua tan cristalina y arena tan blanca.
Te bañabas y luego te ponias un ratito al sol, y enseguida tenias a alguien de jardineria que por un dolar te abria un refrescante coco.
Recomendación: Los cocos con un poco de ron blanco, o batidos con un poco de la pulapa y el caldo junto con el ron, te proporcionan un batido que te hace dar vueltas el paladar, esta buenisimo.
Los paseos eran agradables, ya que podias andar ya andar hacia cualquier dirección y solo veias mar, playa y cocoteros. Podias atravesar hoteles y hoteles e ir hasta unos pequeños puestos en la playa en donde la gente autoctona vendia toda clase de cosas, desde colgantes y pulseras, hasta cuadros o puros y ron.
Aviso: LLevar factor de protección alto, aunque yo soy un tio aguerido y de marjal, con una piel bastante morena, si te descuidabas podias acabar con un quemon considerable
Ei que te'n vas anar en un benicarlando!!!! En Ruben!!! :O
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